¿Sabías que 1 de cada 4 personas sufre cada año de una enfermedad mental?
A nivel mundial, más de 264 millones personas, de todas las edades, sufren de depresión.

¿Cuántas veces comentaste en el trabajo que te dolía la cabeza o hablaste con una vecina de la lesión grave en la pierna que sufrió? ¿Conocemos muy bien los síntomas o las medidas de prevención contra el COVID19? En fin, estamos muy familiarizados como las repercusiones de un desequilibrio en el cuerpo fisco.
Pero, qué pasa cuando: sientes ansiedad, inseguridad, desanimó día tras día, claustrofobia, que no consigues sentir que lo vales a pesar de esforzarte mucho, que te despiertas en medio de la noche y no puedes volver a dormirte? Cuando sientes que no puedes con un día más aunque físicamente todo está bien. ¿Cómo de fácil es para ti hablar de ello con tu jefa/jefe, pareja, o mejor amiga/o?
La Organización Mundial de la Salud dice que la salud mental “(…) es la capacidad de pensar, aprender y comprender sus propias emociones y las reacciones de los demás. La salud mental es un estado de equilibrio interno, como con su entorno. Factores físicos, psicológicos, sociales, culturales, espirituales, participan interrelacionándose en crear este equilibrio ”.
Salud mental trata de tu bienestar. Asimismo haz cosas que te hacen sentir bien. Por ejemplo; charlar con un amigo, dar un agradable paseo, hacer manualidades.
Un trastorno mental o una enfermedad mental es cuando tu “salud mental” se ha puesto enferma. Al igual que te ocurre con una lesión física, tu salud mental también fluctúa. Consecuentemente, por supuesto, puede curarse o estabilizarse, permitiéndote continuar con tu vida y disfrutarla nuevamente.
Lograr el éxito en el trabajo o en casa con tus seres queridos, solo se podrás conseguir aceptando los altibajos emocionales que naturalmente atravesamos todos. Tus sentimientos o tus pensamientos son parte de quien eres. Además, son tan reales e importantes para tenerlos en cuenta como tu cuerpo físico. Cierto que sabes la importancia de comer sano y hacer una actividad física para mantenerte en forma? Pues sería lo natural e indudablemente importante incluir en tu consideración tus estados afectivos para mantenerte saludable.
Reconocer que es natural y hablar sobre ello, con una persona de confianza, puede ayudarte a remontarlos más fácilmente.
Si sientes que tu vida podría ser más liviana, que no te reconoces desde hace tiempo, que vivir el día día te cuesta, o que sientes cualquier otro desafío en salud mental, que sepas que puedes comunicarte conmigo. Te animo a una charla para simplemente compartir lo que te está ocurriendo. No juzgar es parte de mi enfoque. Junto/as podríamos pensar en las opciones existentes que podrían ayudarte a sentir aliviado ante lo que estás viviendo o, encontrar la ayuda adicional que necesites para recuperarte del todo.
Busca ayuda y empieza a sentirte mejor.